Es tocar tierra, llegar al parking, parar, abrir la cúpula y empezar la cara B... la de los papeles, los tiempos, las sumas y las restas, las legalidades... de repente dejas de ser pájaro y te conviertes en "contable". Mirar como sale humo y no precisamente del motor sino de mi cabeza.
A diferencia de la palanca de mando el bolígrafo lo llevo fatal, soy pero que muy torpe, dudo eso de dos más dos cuatro...
Ahora en serio, nos guste más o nos guste menos, toda la parte legal, oficial y de documentación que conlleva nuestra actividad hay que seguirla de manera estricta y seria.
