lunes, 9 de agosto de 2010

Adios... TIMÓN


He leído el comentario en otra entrada que tenía dedicada a Timón y lo he confirmado con su amo Rafa cuando volabamos próximos al Loring ayer... Hace un mes que Timón inicio un vuelo sin retorno.
Durante los años que compartimos aeródromo hubo entre nosotros una relación muy "profesional", no había carantoñas por ninguna de las dos partes, entendíamos que lo mejor es no afianzar lazos que puedan romperse de repente, a mis "Buenos dias Timón" él respondía con una mirada que me decía que todo estaba ok para comenzar los vuelos del día.
Compartíamos dos fobias:
- A ninguno de los dos nos gustaban las aves posadas en la pista y Timón salía motor a tope en su persecución, especialmente si eran urracas.
- Tampoco eran de nuestro agrado las avispas, yo creo que era consciente del peligro que representaban para los pilotos si aparecían dentro de la cabina en vuelo y era por eso que a pesar de sufrir sus picotazos las mataba a mordiscos.
Sin duda el cargo de "jefe de vuelos" se lo tenía más que merecido, pues no creo que haya habido otro con tantos despegues, aterrizajes, tomas y despegues, rasantes, etc., visionados y controlados.
Con los dedos de una mano se cuentan las pocas ocasiones en las que estando en final de la pista activa le ví tomar posesión de la cabecera para obligarnos a realizar motor y al aire, ... estoy seguro que lo hacía porque veía o sentía algo que no le daba buena espina en relación a nuestra toma y de ésta manera se anticipaba al posible incidente,... nunca antes había dicho ésto en voz alta, y si lo hago ahora es porque siempre he tenido la sensación de tener una deuda pendiente con Timón a éste respecto.
Sólo abandonaba su puesto en el aeródromo por la llegada de un rebaño de ovejas, la causa era la linda perrita pastora que las acompañaba, entonces ya se le podía dar por perdido ese día y esa noche... creo que todos le habríais perdonado el desliz.´
Timón ha sido un amigo más en mi vida aviadora, alguien que ha compartido muchos de mis momentos aéreos y por eso éste pequeño homenaje.
Si alguno de vosotros piensa que estoy exagerando y que sólo se trata de un perro, probablemente es que nunca ha tenido relación con uno... para muestra un botón, un hecho científicamente demostrado: por cada vez que miramos a nuestro perro, él nos mira 80.
Buen vuelo Timón ¡¡¡