lunes, 18 de enero de 2010

Nube, neblina, niebla...




Todos somos conscientes del intenso romace que existe entre aviadores y nubes, para nosotros no son sólo "Un hidrometeoro consistente en una masa visible formada por cristales de nieve o gotas de agua microscópicas suspendidas en la atmósfera"...
Son mucho más, nos marcan la pauta para disfrutar de un espectacular vuelo bailando con ellas o quedarnos pegados a la pista tratando de limpiar nuestra mirada de su nebuloso abrazo.
Aprovecho desde aquí queridas "masas de aire saturadas" para pediros que mantengais vuestra distancia al suelo, os prometemos que nosotros subiremos a visitaros, a cortejaros, a besaros,... sed buenas y pacientes, quedaros arriba...
Vuestra ansiedad por estar con nosotros, a lo único que conduce es a que nos quedemos como amantes bisoños, mirándonos, quietos en la pista, y sin disfrutar de vuelos...
Bueno, una última mirada querida amiga, una última foto y me voy al "Punto Charlie", por lo de la "C" de Cantina, a mojar mis penas...