Los tres felices y contentos... nosotros también:
A Paloma la regalaron un paseo por el aire, desde el aeròdromo hasta un bonito pueblo donde fuimos saludados desde tierra. Hizo honor a su nombre y voló como si lo hubiera estado haciendo toda su vida.
Jesús nos dijo que en la próxima visita le toca a él, pues nada, hasta pronto amigos ¡¡¡