En el semblante del alumno Abraham ya se puede obsevar la madurez adquirida y acumulada en sus vuelos de instrucción y en su aprendizaje teórico, cualquiera al ver la foto creería que era un día de los de sol y moscas, de esos en los que uno no sabe si vuela o anda plácidamente por el aire... pues doy fe que se trató de un vuelo de instrucción inmerso en turbulencias continuas, pelotazos, viento cruzado y racheado en pista que ponía a prueba el dominio de la situación por parte de Abraham...
Enhorabuena por tu progresión, pronto llegará un día muy especial en tu vida aviadora, espero estar cerca para celebrarlo contigo como se merece.
